Nada fácil que te pregunten algo acerca de ti misma.

 

Pero,  a ver,  aprendí que tengo que contarle algo  al mundo y que esa historia tiene la capacidad de  salvar vidas, sí, así es, Tenemos un poder transformador que debemos explotar. 

 

Nací en un pueblo muy, muy pobre en el oriente de mi país Venezuela; con muchas carencias y pocas oportunidades  pero tuve algo que nadie, ni las circunstancias, me pudieron arrebatar :  mis sueños,

 

los sueños inalcanzables gestados en aquella casa humilde y vacía, esos sueños que parecían irreales pero de repente se fueron cumpliendo. 

​

Han pasado mil cosas pero de las mejores fue haber conocido y crear una relación con Dios, en la cual aprendí que estoy viva y fui creada con un propósito incorruptible. 

Esto no es toda mi vida, espero a lo largo de estas muchas líneas venideras podamos conocernos más. Desde hoy te amo. 

Historia sin fin... ¡sigue checando!